Así como la medicina avanza a pasos agigantados también la tecnología para mascotas está innovando en todo lo relacionado con la salud y el cuidado de nuestros fieles compañeros
Su historia comenzó hace 12 años y fue como de película, cuenta Roxana Urrieta, una capitalina de 25 años de edad: “estaba deprimida, había entrado a la secundaria y mis papás comenzaron su proceso de divorcio, me sentía muy sola”, hasta que en un mercado cercano a su domicilio tropezó con una vendedora que tenía cinco perritos en una caja de cartón y descubrió a un cachorrito café rojizo con manchas blancas que intentaba escapar, curiosamente ella escuchaba Maybe de Janis Joplin, su cantante favorita. Allí nació su amor a primera vista por Jopi, contracción del apellido de su intérprete preferida.
Desde ese día se hicieron inseparables, el perrito estuvo a su lado en sus momentos más trascendentes: el divorcio de sus padres, su primera ruptura amorosa, su primera materia reprobada, la pérdida de su virginidad y las primeras vacaciones que pasó con sus amigos.
Todo era miel sobre hojuelas, pero como nada es para siempre, la edad y la falta de reflejos, provocaron que Jopi no pudiera evitar que un auto lo atropellara, destrozándole dos patas. El conductor se dio a la fuga y aunque la atención fue inmediata, el veterinario no pudo evitar la amputación.
“Pensé lo peor, lo primero que se me vino a la cabeza era que habría que sacrificarlo”, rememora Roxana, sin embargo, gracias a la oportuna intervención quirúrgica, el perro salvó la vida, pese a ello el especialista advirtió que sí podría vivir sin patas pero que no volvería a caminar.
El mismo veterinario le dio una luz de esperanza: en Estados Unidos estaban desarrollando prótesis para perros. De inmediato, Roxana se puso en contacto con una clínica en Texas: 400 dólares y dos semanas después llegaron las nuevas patas del can.
El desenlace de la historia tuvo un final feliz y Jopi, pese a su edad, todavía se desplaza con soltura. Su dueña cambió las antiguas prótesis por unas de impresión 3D que le amoldan a la perfección: “no corre tan rápido como antes pero es por la edad, tengo claro que ya es un perro viejo, pero mientras yo pueda hacer algo para ayudarlo lo mantendré a mi lado”, suscribe Roxana.
Más que humanos
Este tipo de historias se replican alrededor del globo debido a la gran cantidad de personas que comparte su vida con mascotas, tan sólo en Estados Unidos se estima que más del 62% de las personas posee al menos un animal de compañía. Por esta razón la tecnología en este sector se ha desarrollado a pasos agigantados, uno ni se imagina la cantidad de productos que existen en el mercado. Esta industria floreciente promete facilitar no sólo la vida de los animales, sino de sus dueños.
La diversificación va más allá del sector salud, también se cuentan con elementos de entretenimiento, monitoreo, alimentación a distancia y hasta accesorios y dispositivos de limpieza. Ni qué decir de lo valioso que resulta la tecnología en el campo de la medicina y geriatría veterinaria donde en la última década se han conseguido grandes logros: neuroprótesis cerebroespinales (permiten recuperar la movilidad en patas traseras), sillas de ruedas para perros y gatos, prótesis impresas en 3D, marcapasos caninos, implantes oculares para recuperar la visión, entre otros.
Un arma de dos filos
El uso de esta tecnología permite a los animales de compañía mantenerse saludables por más tiempo y ser felices gracias a la amplia variedad de dispositivos que permiten estar conectados a sus dueños.
Si bien el mercado de las mascotas ha crecido en los últimos años, también la tendencia a dejarlos solos en el hogar. Al respecto, especialistas en todo el mundo como Pamela Wyman, gerente de la escuela de entrenamiento de mascotas DogEvolve en Oakland, California, han declarado que: “La tecnología puede ser útil como accesorio, una manera de enriquecer la relación con la mascota, pero no sustituye el tiempo que uno debe dedicarle a su perro”.
En México las cifras no son claras, pero en Estados Unidos, por ejemplo, cerca de 80 millones de hogares tienen mascotas registradas, lo que se tradujo en 2015 en una derrama económica por parte de sus dueños de más de 60,000 millones de dólares, según cifras de la Asociación Estadounidense de Productos para Mascotas.
Pero a medida que aparecen nuevos artefactos en el mercado, los expertos advierten que el exceso de confianza en ellas puede ser perjudicial, pues la gente comienza a darle mayor responsabilidad a los auxiliares tecnológicos, que pese a “diseñarse con la más alta calidad y con la mejor de las intenciones, pueden presentar fallas que dañen a las mascotas”, dice Wyman.
Los mejores productos
´Pet Cube
Cubo de aluminio que permite al usuario jugar a distancia con su mascota, hablarle y ver lo que hace. El dispositivo integra cámara, micrófono, bocinas y se conecta a la red para manipularlo desde una app en el celular.
Pinto Feed
Dispensador que funciona mediante una app para smartphone, con ella se puede alimentar a su mascota a distancia, sólo con un clic se sirve automáticamente una porción de alimento y se emite un aviso cuando ha sido consumido.
Pet Evacuation Jacket
Chaleco pensado para desastres naturales, hecho con el mismo material de los uniformes de los bomberos, cuenta con cierre y correa de seguridad, además de numerosos bolsillos para llevar comida y documentos del animal.
DogTV
Canal de televisión exclusivo para perros que funciona 24/7. Si el perro pasa todo el día solo en la casa, este canal ayuda a disminuir el estrés y la ansiedad para que no destroce los muebles del hogar.
PetSpotter
Red social que ayuda a encontrar mascotas perdidas: marca la localización del animal vía GPS, le toma una foto para subirla al sistema. Permite publicar la información en redes sociales para hacer más efectivo el proceso de búsqueda.
T-Pai
Casa inteligente, en forma de camión británico, incluye desde comedero automático, cama climatizada y sistema de comunicación, hasta un baño con limpieza programada.
(Mario Ostos)
Tomado de Contenido.com